Los proyectos de restauración de casas antiguas me encantan. Es un privilegio poder reformar una vivienda de esas con muchos años de historia, ya sea en un pueblo o las casitas antiguas de la ciudad.
Normalmente los propietarios de casas antiguas suelen ser por una herencia o porque han encontrado una casa que al tener que ser reformada tenía un buen precio, incluso contando la inversión de reformarla. Esto es algo común, ya que tiene varias ventajas, como por ejemplo, se pagan menos impuestos, ya que suelen estar escriturados menos metros por antigüedad o no has de pagar tanto impuestos por las reformas. Normalmente comprar una casa de obra nueva suele tener un precio más elevado.
Otra ventaja es que puedes reformar la casa a tu medida, aprovechar para darle ese estilo que te gusta y con el que te identificas. Reformar una casa antigua tiene un montón de opciones a nivel de diseño que me encanta explorar.
Factores a tener en cuenta en la reforma de una casa antigua
Diseñar el proyecto de interiorismo
Es recomendable contar con un interiorista profesional, ya que en la primera etapa debes definir muy bien qué quieres hacer con esta casa. En una reforma de una casa antigua siempre suele haber algún imprevisto pero contar con la experiencia de alguien que se dedica a esto, minimizará los costes y los sustos en el proceso.
Lo ideal es detenerse a ver ideas, para ello puedes comprar revistas o visitar páginas de internet, como Pinterest, en los que verás muchas opciones para coger ideas. Tampoco te bloquees en este punto, ya que a veces ver demasiado puede ser contraproducente. Pero si es bueno que cuando hables con tu interiorista le puedas mostrar imágenes de la idea que te gusta. Después ya le daréis forma juntos.
Una vez que sabes que quieres, es el momento de diseñar un proyecto que se adapte a tus necesidades y tus posibilidades.
Estado de la estructura de la vivienda
Estamos hablando de casas antiguas, de modo que no hemos de olvidar algo básico: comprobar bien el estado de las estructuras, los muros de carga, los techos, las instalaciones de luz, agua, gas. Comprobar que no tiene ninguna enfermedad en los cimientos, como alguna plaga o que los materiales primarios estén en buen estado.
Muy importante asegurarse bien de todas las estructuras de madera, ya que suele ser uno de los problemas que pueden aparecer cuando menos lo esperas, como en el mal estado de vigas de carga, escaleras, puertas, ventanas, con carcoma o algún otro deterioro por el paso del tiempo, las temperaturas y a veces la falta de mantenimiento.
La humedad es otro punto muy importante a tener en cuenta, ya que sería una pena que una vez tengamos la casa pintada y decorada comiencen a verse humedades que no habíamos previsto. Por eso contar con un profesional experto en reformas en este punto es casi imprescindible.
La eficiencia energética
Es habitual que la eficiencia energética de las casas antiguas sea bastante precaria, porque el modo de construir no estaba muy presente en este punto que ahora es básico. También es cierto que los materiales en muchas ocasiones eran mejores, de modo que aislaban más de los cambios de temperatura, pero es un buen momento para optimizar la climatización del nuevo hogar, con el objetivo de rentabilizar la energía lo máximo posible, incluso incluyendo la instalación de domótica en varias zonas del hogar.
Tener el presupuesto cerrado
Cuando comienzas la remodelación de tu nueva casa, has de tener en cuenta que lo más seguro es que tu presupuesto al terminar sea algo más de lo que tenías previsto, para evitar que haya un margen de error muy elevado es importante tener en cuenta todos los gastos asociados antes de empezar. Lo primero, como ya hemos dicho, es ver muy bien el estado de la vivienda, ya que es aquí donde solemos llevarnos las sorpresas menos agradables. Tener claro cuánto se ha de invertir en las instalaciones y en la rehabilitación de la estructura. Y a partir de ahí distribuir el presupuesto en los materiales, mobiliarios etc.
Estos consejos son una pequeña pincelada, hay mucho más que me gustaría contarte. ¿Te gustaría un segundo post sobre cómo diseñar un proyecto de una casa antigua?