A muchas de nosotras nos encanta la moda, y estar a la última, pero no sólo con la ropa que llevamos puesta, también con las prendas con que vestimos nuestro hogar.

Pero las tendencias en interiorismo, van mucho más allá de los colores de temporada o los tejidos, cuando hablamos de tendencia, hablamos de estilos, materiales, muebles, objetos de decoración… hay un montón de posibilidades.

Hoy te voy a hablar de las tendencias que se predijeron el 2020 para este año, y que realmente han llegado pisando fuerte.

Decorar con artesanía y materiales naturales.

Ya lo decía mi abuela, pero si eso lo llevaba con con 20 años!! ¿Vuelve a estar de moda? Pues sí, las modas vuelven, y con ellas también el gusto por lo retro.

Estamos viviendo un momento que a mí, me parece precioso, dando importancia a lo que se hace con las manos, con cariño, lenta y cuidadosamente.

Han vuelto las cestas de mimbre, los tapices de lana, la decoración con plantas, la madera, los cuadros de pintores locales decoran nuestras paredes, y en general el gusto por lo Hand Made.

Papeles pintados

Papeles pintados interiorismo

Pues sí, como os decía antes, todo vuelve, y el papel pintado no iba a ser menos. Ha venido, además pisando fuerte.

Marcas de gran reconocimiento se han subido al carro, y están diseñando papeles preciosos para todos los estilos, gustos y colores.

Es tendencia poner un papel pintado con fuerza y color en una pared de la estancia y acompañarlo con paredes de tonos neutros, para enfocar toda la atención en el papel. Estos de hecho son en sí mismos un objeto decorativo de gran valor.

También se puede jugar con papeles pintados más discretos, y darle más protagonismo a los textiles o la pintura de las demás paredes que lo acompañan.

Aquí no hay norma escrita, lo importante es encontrar justo lo que tu espacio necesita.

Estilo industrial

Estilo industrial interiorismo

Y es que efectivamente, también hay una fuerte tendencia hacia el estilo industrial, las vigas a flor de piel, las paredes enyesadas, las bóvedas al natural… es una moda que cada vez tiene más adeptos.

Huimos de las líneas perfectas y los acabados rigurosamente impolutos, hacia una visión más rústica y natural, en la que nos dejamos llevar por la belleza de la imperfección, y también de la originalidad.

Normalmente, a este estilo van ligados los colores neutros, y materiales como la madera, el hierro. Paredes de ladrillo visto, vigas al descubierto. Es muy agradecido en espacios amplios y abiertos. Se encuentra habitualmente en Loft de los barrios más bohemios de las grandes ciudades.